Plenitud . 2019-07-18
2Reyes capÃtulo 22
22 . 1 , 2 Judá fue
bendecido con un último gran avivamiento religioso bajo su decimosexto
gobernante, JosÃas .
22 . 3 - 7 Se puede
trazar un interesante paralelo entre JosÃas y Joás, octavo rey de Judá.
JosÃas, como Joás, ascendió al trono a una edad temprana (a los ocho años), y
procedió a establecer un plan para la restauración del templo. Al igual que
Joás, quien recibió ayuda del sacerdote Joiada, JosÃas fue asistido por otro
sacerdote: HilcÃas
22 . 3 - 20 La
mujer y las posibilidades proféticas en nuestros dÃas : Hulda. MUJER. El
nombre «Hulda» se deriva de la raÃz hebrea cheled que significa «deslizarse velozmente». Quizá
el nombre refleje la rapidez de mente de Hulda y su habilidad para discernir
rápida y correctamente las cosas de Dios. En cualquier caso, Hulda fue usada
por Dios en este fugaz momento de la historia para dar a conocer su juicio y su
profecÃa, y para encender la chispa de uno de los más grandes avivamientos de
la historia. Hulda es un ejemplo notable del carácter y del potencial de la
mujer que hoy puede recibir la llenura del EspÃritu Santo para acometer con
éxito cualquier tarea que Dios le encargue. Vale la pena observar cómo el sumo
sacerdote HilcÃas y el escriba Safán, acudieron a Hulda para recibir palabra de
sabidurÃa de Dios (v. 14). Es evidente el respeto y la confianza de estos
hombres hacia Hulda, lo que nos enseña que la influencia espiritual fluye de la
forma de vida y no simplemente de la presencia de dones espirituales. Act_2:17-18 promete que en los postreros dÃas en
la Iglesia proliferará el derramamiento del EspÃritu Santo sobre las mujeres.
Que el ejemplo de Hulda en cuanto a respeto, confiabilidad y correcta forma de
vida nos enseñe a tener un ministerio espiritual sabio y efectivo.(Rt 1.1-4.4/Est_4:1) F.L.
22 . 8 - 10 En el proceso
de reparar el templo, HilcÃas descubrió el libro de la Ley , y el
escriba Safán lo leyó delante del rey JosÃas. A la luz de las reformas de
JosÃas, se evidencia que este libro contenÃa gran parte de Deuteronomio.
22 . 11 - 20 La reacción
de JosÃas al escuchar la lectura del libro de la Ley fue de inmediato
arrepentimiento y búsqueda de la dirección de Dios. La profetisa Hulda lo
asistió en este empeño. Debido a la humildad mostrada por JosÃas, el Señor
permitió a la nación vivir en paz durante su reinado. Pero Judá todavÃa tendrÃa
que enfrentar el juicio de Dios por su prolongada apostasÃa (véase 23.26, 27).
22 . 14 Los profetas
JeremÃas (Jer_1:2), SofonÃas (Zep_1:1), y quizás Nahum y Habacuc, ministraban
en ese tiempo dentro y en los alrededores de Jerusalén.